La tecnología eSIM (embedded SIM) está destinada a sustituir a las tradicionales tarjetas SIM que insertamos en nuestros teléfonos móviles cuando compramos un terminal nuevo o simplemente decidimos cambiar de operador de telefonía.
El eSIM es en realidad un chip eUICC (Embedded Universal Integrated Circuit Card), que va montado en la placa de circuito de un aparato electrónico con conexión celular, y sobre el que se descarga desde la red, una SIM virtual que llamaremos perfil de operador móvil.
Actualmente, el GSMA ha estandarizado dos esquemas para eSIM basados en dos casos de uso:
• El primero es el destinado a equipos del Internet de las cosas (IoT) y que llamaremos Machine to Machine (M2M) (SGP.01), destinado a equipos del Internet de las cosas (IoT).
• El segundo es para equipos de consumo (SGP.21), destinados a usuario final.
Ambos casos de uso se diferencian básicamente en la dirección del control, es decir, de quién decide la descarga del perfil de operador móvil sobre el eUICC. Por un lado, el esquema M2M está orientado a evitar que el equipo tenga interacción con el usuario y que la orden de descarga del perfil del operador se realice desde la propia red móvil, ya que estos equipos no suelen tener un interfaz de usuario con el que interactuar.
En cambio, el esquema de eSIM de consumo está orientado a que sea el usuario el que elija un operador de una lista de operadores disponibles y decida qué perfil de operador móvil quiere instalar en el dispositivo, este es el caso de teléfonos móviles, tablets, relojes inteligentes, etc.
Las ventajas del modelo M2M
Los beneficios que aporta M2M son:
• Permite desplegar gran cantidad de equipos y darlos de alta prácticamente a la vez y sin intervención de un usuario. Solo será necesario enviar la lista de los identificadores de los eSIM que lleven los equipos al operador con el que estamos contratando el servicio.
• Permite la gestión remota de los equipos y su configuración nada más conectarse a la red (out of the box connection).
• Permite la activación, desactivación y cambio de perfil de operador móvil remotamente, por el aire.
En cambio, en el modelo de consumo, es el usuario final el que debe dar de alta el equipo en la red móvil. Para dar de alta un teléfono móvil, actualmente hay que pedir al operador de telefonía un código QR y luego escanearlo con una aplicación en el propio dispositivo. Imaginad lo que supondría tener que pedir al operador y luego escanear 1.000 códigos QR para dar de alta 1.000 equipos, por ejemplo.
La ventaja del modelo M2M parece clara para el caso de despliegues masivos de equipos, incluso para casos de cambio de operador en una base instalada de equipos. Ahora mismo, con el uso de tarjetas SIM físicas, un operario tendría que desplazarse, y tener acceso a cada equipo, extraer la tarjeta SIM y cambiarla por la del nuevo operador contratado. En el caso de equipos con eSIM, no sólo sería innecesario acceder físicamente al equipo, sino que se podría cambiar de operador toda una base instalada de equipos en muy poco espacio de tiempo, remotamente y por el aire.
Más ventajas…
Otras ventajas del eSIM son la posibilidad de tener varios perfiles activos de distintos operadores y poder cambiar entre ellos según las necesidades. Por ejemplo, un vehículo que viaje por Europa puede tener una lista de perfiles para cada país que atraviese y cambiar de uno a otro automáticamente según va atravesando fronteras, todo ello sin intervención alguna.
Actualmente, en Teldat estamos trabajando para dotar a nuestros nuevos equipos de eSIM, de forma que podamos ofrecer a nuestros clientes productos que dispongan de la última