En la era digital, las cadenas de suministro son esenciales para el funcionamiento fluido de las empresas y la economía en general. Las empresas dependen cada vez más de un ecosistema interconectado de proveedores, software y servicios para funcionar. Sin embargo, en los últimos años, hemos sido testigos de una creciente amenaza: los ataques contra cadenas de suministro. Esta «cadena de suministro» digital, si bien ofrece eficiencia y flexibilidad, también crea nuevas vulnerabilidades que los ciberdelincuentes están explotando con creciente frecuencia. Estos ataques, a menudo silenciosos y difíciles de detectar, representan una seria preocupación para las organizaciones en todo el mundo, ya que tienen el potencial de afectar a una gran cantidad de empresas y usuarios de forma simultánea. En este artículo, exploraremos qué son estos ataques, cómo se llevan a cabo y qué medidas pueden tomar las empresas para protegerse.
Definir un ataque de cadena de suministro
En primer lugar debemos definir qué son los ataques a la cadena de suministro: son estrategias maliciosas diseñadas para comprometer la integridad, seguridad o disponibilidad de los productos o servicios en una cadena de suministro. Se produce cuando un ciberdelincuente ataca a un proveedor o un componente utilizado por varias empresas. Al comprometer un solo punto en la cadena, el atacante puede obtener acceso a las redes y sistemas de múltiples organizaciones sin necesidad de atacarlas directamente.
Estos ataques pueden tener diversas formas, desde la inserción de malware en productos o software hasta la manipulación de componentes físicos durante el proceso de fabricación. Vamos a describir algunos de los más habituales.
Ataques a cadena de suministro más frequentes
- Ataques a componentes de código abierto: Los componentes de código abierto son ampliamente utilizados en el desarrollo de software. Los ciberdelincuentes pueden insertar código malicioso en estos componentes, que luego se integra en el software de numerosas empresas.
- Ataques de «watering hole»: Los ciberdelincuentes pueden comprometer un sitio web o servicio web utilizado por un grupo específico de empresas o usuarios. Cuando las víctimas visitan el sitio web infectado, se les puede infectar con malware o redirigir a sitios web maliciosos.
- Infiltración de Malware: Los atacantes pueden comprometer la cadena de suministro insertando malware en el software o firmware de productos antes de que lleguen a los consumidores finales. Este tipo de ataque puede tener consecuencias devastadoras, ya que el malware puede permanecer latente durante mucho tiempo antes de activarse, lo que dificulta su detecció
- Manipulación de Hardware: En algunos casos, los atacantes pueden infiltrarse en la cadena de suministro manipulando físicamente componentes de hardware. Por ejemplo, podrían alterar dispositivos electrónicos para incluir puertas traseras que les permitan acceder de forma remota a sistemas una vez que estén en funcionamiento.
- Ataques a Proveedores de Servicios: Los proveedores de servicios en la cadena de suministro también son vulnerables a los ataques. Por ejemplo, un proveedor de almacenamiento en la nube podría ser comprometido, lo que permite a los atacantes acceder a datos confidenciales almacenados por múltiples clientes.
Estos tipos de ataques tienen diversos tipos de consecuencias devastadoras para las organizaciones afectadas. Además de los costes financieros asociados con la pérdida de datos o la interrupción de las operaciones comerciales, estos ataques también pueden dañar la reputación de una empresa y socavar la confianza del cliente, provocando pérdidas económicas significativas.
Ataques de cadena de suministro: ejemplos
Algunos ejemplos conocidos que podemos usar como referencia son los siguientes:
- Ataque a SolarWinds (2020): Este es uno de los ataques a la cadena de suministro más notorios de los últimos años. Los atacantes comprometieron el software de gestión de redes de SolarWinds, insertando un malware conocido como «Sunburst» en una actualización del software. Esto permitió a los atacantes acceder a las redes de miles de organizaciones, incluidas agencias gubernamentales y grandes empresas, durante meses antes de ser detectados.
- Ataque a Target (2013): En este caso, los atacantes comprometieron la cadena de suministro de Target a través de un proveedor de HVAC (Calefacción, Ventilación y Aire Acondicionado). Los atacantes accedieron a las redes de Target a través de las credenciales robadas del proveedor y luego instalaron malware en los sistemas de punto de venta de la empresa. Este ataque resultó en el robo de datos de millones de clientes de Target.
- Ataque a Asus (2019): Los atacantes comprometieron los servidores de actualización de software de Asus, insertando malware en las actualizaciones de firmware distribuidas a los usuarios de productos Asus. Esto permitió a los atacantes acceder a miles de computadoras en todo el mundo. Aunque el número exacto de dispositivos afectados no se conoce con certeza, se estima que podría haber sido de hasta un millón
- Ataque a la cadena de suministro de Supermicro (2018): Según informes, los atacantes chinos habrían infiltrado los servidores de Supermicro durante el proceso de fabricación, insertando chips maliciosos en las placas base de los servidores. Estos chips podrían proporcionar a los atacantes acceso remoto a los sistemas de las organizaciones que utilizan estos servidores.
¿Qué podemos hacer para evitar o remediar ataques?
Existen diversas alternativas para protegerse:
- Evaluación de proveedores:
Realizar una debida diligencia exhaustiva al seleccionar proveedores en la cadena de suministro. Esto incluye investigar el historial de seguridad del proveedor, sus prácticas de seguridad internas y su historial de cumplimiento con regulaciones de seguridad relevantes.
Realizar auditorías de seguridad periódicas a los proveedores para verificar el cumplimiento de las políticas de seguridad acordadas y detectar posibles vulnerabilidades o riesgos.
- Monitorización continua:
Implementar sistemas de monitoreo continuo en toda la cadena de suministro para detectar posibles intrusiones o anomalías de seguridad.
Utilizar herramientas de detección de intrusiones y análisis de comportamiento para identificar actividades sospechosas en tiempo real.
Establecer alertas automáticas para notificar sobre actividades no autorizadas o potencialmente maliciosas en la cadena de suministro.
- Seguridad del software y firmware:
Verificar la autenticidad e integridad de las actualizaciones de software y firmware antes de su implementación. Utilizar firmas digitales y verificación de hash para asegurarse de que las actualizaciones provengan de fuentes legítimas y no hayan sido alteradas.
Implementar mecanismos de seguridad en el proceso de desarrollo de software y firmware para prevenir la inserción de malware o vulnerabilidades durante el desarrollo.
Mantener actualizados los sistemas de seguridad y aplicar parches de seguridad regularmente para mitigar vulnerabilidades conocidas en el software y firmware utilizados en la cadena de suministro.
- Educación y concienciación:
Fomentar una cultura de seguridad en toda la organización y entre los proveedores, enfatizando la importancia de la seguridad de la cadena de suministro y la responsabilidad compartida en la protección de los activos y datos de la empresa.
- Respaldo y redundancia:
Implementar estrategias de respaldo y redundancia en la cadena de suministro para mitigar el impacto de posibles interrupciones o compromisos de seguridad.
Mantener copias de seguridad actualizadas de datos críticos y sistemas importantes en ubicaciones seguras y fuera del alcance de posibles ataques.
Los ataques a la cadena de suministro son una amenaza real y creciente para la ciberseguridad de las empresas en la era digital. Debido a las consecuencias que van desde la pérdida financiera hasta el daño a la reputación, es crucial que las organizaciones tomen medidas proactivas para protegerse implementando prácticas de seguridad robustas, realizando una debida diligencia exhaustiva en la selección de proveedores y mantener una vigilancia constante. En un mundo cada vez más interconectado, la seguridad de la cadena de suministro es más importante que nunca, y Teldat está a la vanguardia de la protección de las comunicaciones de la empresa, tanto para entornos IT como entornos OT, mitigando cualquier posibilidad de ataque.